Luego de 18 años se hizo realidad el sueño del tenis peruano en su intento por ingresar al consagrado Grupo Mundial de la Copa Davis. No están lejanos los días que en 1989, la afición a este deporte se dio cita en las instalaciones del Jockey Club del Perú para espectar el enfrentamiento entre los tenistas peruanos y los consagrados raqueteros de Australia, muchas veces ‘dueños’ de la famosa ‘ensaladera de plata’. El equipo más completo en nuestra trayectoria tenística no pudo vencer el obstáculo y cayó por 3/2. Vimos la entrega de Jaime Yzaga, Carlos Dilaura y José Luis Noriega, aplaudimos cada juego pero no fue posible triunfar. Esta historia se repitió cinco años después luchando como visitantes un gran cuarteto de Dinamarca; nuestra delegación conquistó elogiosos comentarios por su actuación pero perdió 4/1.
Hoy la historia es distinta. Se logró hacer realidad el esperado sueño, se consiguió el anhelo de ingresar al Grupo Mundial y las raquetas son otras, esta vez en manos de Luis Horna, Iván Miranda y Matías Silva en la Rinconada Country Club con un resultado inapelable Perú 4, Bielorrusia 1. El tenis peruano, siempre apoyado por el IPD, está entre los mejores 16 del mundo, porque si bien es cierto que el torneo anual de la Copa Davis no pertenece al circuito olímpico, es el evento más importante del mundo, tal vez más notable que las citas de Inglaterra, Francia, Estados Unidos y Australia entre otros.
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